EL IMPERIO DE TONY MONTANA CONTRA EL DINERO Y LA DROGA
Walter, Jessee, Mike y su nuevo socio deben lidiar con las consecuencias del robo de la metilinamina. Mientras tanto, Mike y Jessee tienen dudas sobre si su continuidad en el negocio de las metanfetaminas es viable.
Serie: Breaking Bad
Temporada: 5
Capitulo Nº: 6
Titulo Capitulo: Buyout
Fecha de Emisión: 20/08/2012
Walter, Jessee, Mike y su nuevo socio deben lidiar con las consecuencias del robo de la metilinamina. Mientras tanto, Mike y Jessee tienen dudas sobre si su continuidad en el negocio de las metanfetaminas es viable.
Una de las razones por las que Stanley Kubrick es considerado uno de los mejores directores de todos los tiempos (en mi TOP 5 desde luego está) es por su eficaz eclecticismo y su constante mezcla de géneros. Bélico (Paths of Glory), ciencia ficción (2001), comedia negra (Dr. Strangelove), terror (The Shining), drama de época (Barry Lyndon), thriller (The Killing)…Kubrick era imprevisible y se reinventaba en cada film, ofreciendo casi siempre obras maestras. Era un Napoleón o un Alejandro Magno, conquistando siempre nuevos territorios que posteriormente serían explotados por otros. Por eso, si Kubrick fuera una serie, sería Breaking Bad. Siempre en constante movimiento, en una escalada kamikaze hacia la perfección y cumpliendo las leyes que ellos mismos crearon para el descenso a los infiernos de su protagonista: solución, crecimiento, disolución, descomposición y…transformación. Porque han jugado con todos los géneros sin abrazar ninguno plenamente con una facilidad insultante. Comedia negra, western, thriller, drama, noir, acción…todos ellos han tenido su momento de gloria en Breaking bad con unos resultados formidables. Si en el capítulo anterior el espíritu Fordiano del western más clásico impregnaba la narración (sobre todo en los apabullantes quince últimos minutos), aquí han sido capaces de enmascarar una escena altamente dramática con un sutil barniz de comedia negra. Otra nueva jugada de reinvención con un más difícil todavía que ha funcionado de manera sobresaliente y, sobre todo, aportando un balón de oxígeno al sufrido espectador, pues esta temporada está siendo especialmente exigente con el corazón de sus seguidores (siempre a prueba). El final del 5×05 fue de infarto y las consecuencias de la acción de Todd son las esperadas: ha provocado la desunión de la recién estrenada banda de Jesse Heisenberg James, con un Mike asustado por el futuro de su sobrina, un Jesse angustiado por los daños colaterales, un Todd que empieza a demostrar su frialdad y el propio Heisenberg, totalmente sumido en su otro yo (y disfrutando con ello).
Para empezar, la ya clásica y esperada escena pre-créditos vuelve a poner al espectador entre la espada y la pared. Nuestros protagonistas despedazan la moto del niño asesinado en el episodio anterior para diluirla en un barril, a modo de Víctor, el secuaz de Gus asesinado por el propio Fring en el 4×01. El siguiente es el niño, ante las funestas miradas de Mike y Heisenberg. Desgarrador y deprimente. Y es ahí cuando nos paramos a pensar… ¿Somos cómplices de Mike, Heisenberg, Todd y Jesse?. ¿Hasta donde se puede considerar a alguien voyeur y no parte implicada en los hechos? Es cierto que somos simples espectadores de un show de televisión pero también es cierto que este show te obliga a empatizar radicalmente con sus personajes, ya que has viajado emocionalmente con ellos y atravesado estados mentales íntimos y viscerales, en algunos casos casi de cero, como en el de Skyler, Walt (Heisenberg ahora) o Jesse. Guión puro y duro. Lo más gratificante de todo es que lo han hecho sin emplear ningún truco barato, todo lo contrario, los guionistas nos han dado la opción de cogerles manía, odiarlos o abandonarlos. En ningún momento nos los han glorificado ni dividido en malos o buenos, siempre hay grises, lo que los hace infinitamente más interesantes y redondos. Son personajes Hustonianos, es decir, criminales o perdedores pero siempre humanos, nunca extremistas del todo ni con sentimientos o acciones mecanizadas. Es cierto que Heisenberg está en modo extremo pero eso es porque hemos presenciado su transformación desde cero y somos partícipes de ello. Por lo que, retomando mi reflexión anterior, cuándo nos escandalizamos de las acciones del grupo (sobre todo de Jesse y Heisenberg)… ¿Qué parte de responsabilidad tenemos nosotros en todo esto? No hemos disparado al chico de la moto pero no dudéis que hemos cargado el arma de la mano de Pinkman y White.
En este episodio se ha producido una grieta importante en el grupo y, posiblemente, un punto de no retorno para todos ellos. Todd está mostrando lentamente quien es, su verdadera cara, y parece enseñarle a Heisenberg el camino a seguir, una posible alianza con él. Aparte, parece ser un profesional del crimen y ser poseedor de una mente fría y sin remordimientos. Después de la acalorada charla con Mike, vemos como sonríe mirando la araña de su víctima. No le importa lo más mínimo el niño, hace tiempo que traspasó sus límites morales y su única ambición es ser parte de algo, en este caso de la sociedad del crimen, como les deja bien claro a Los Tres Amigos. Por lo tanto, parece claro que no busca liderato ni se obsesiona con el dinero…un aliado ideal de Heisenberg, a quien respeta y admira. Y Mr. White lo sabe. Por eso prefiere mantenerle en nómina aún habiendo cometido un vil asesinato contra un menor. Intuye que necesitará tirar de él en un futuro no muy lejano y todo parece indicar que puede ser el sustituto ideal de Mike, que no para de retar su liderazgo. Precisamente Mike es el primero que quiere abandonar el barco debido al permanente acoso de la D.E.A. y su miedo a que su sobrina sufra algún daño indirecto. Heisenberg está encantado con la marcha de Mike pero este, que ha olido un negocio que puede retirarle antes de ser encarcelado, convence a Jesse para que se marche con él. Imagino que la conversación no habrá durado mucho, ya que Jesse está consumido por el remordimiento y la culpa por los cadáveres que van dejando a su paso y necesita imperiosamente salir de este sórdido mundo antes de caer en la oscuridad. El único que no quiere salir del negocio es Heisenberg, al que la muerte del niño no le ha afectado en lo más mínimo…
Heisenberg quiere montar su imperio a toda costa, quiere ser Tony Montana y, como vimos anteriormente, nada va a pararle, ni siquiera un Mike que le sigue tratando como si fuera un súbdito de Gus. Gran error. Este no es el Walter White que conoció un día y, personalmente, apuesto a que Mike será asesinado al final de esta temporada. La humillación de encadenarlo al radiador y querer arrebatarle su recién inaugurado negocio no creo que quede impune (ese plano final…), ya que la mente del nuevo Rey del narcotráfico de Nuevo México está rebosante de orgullo y venganza. De hecho, vuelve a hacer gala de sus más que efectivas artes para la manipulación y el engaño con Jesse. ¿Qué sentido tenía invitarlo a cenar con su esposa rehén? Aparte de para brindarnos la escena más cómica de toda la serie (impagable Aaron Paul) con un tira y afloja entre Skyler y Heisenberg con Jesse en medio intentando normalizar la velada, la escena tiene un sentido estratégico, pues Heisenberg ha demostrado a Jesse que aquello por lo que luchó en su día (el bienestar de su familia) ya no existe. Sus hijos no están en casa y su esposa desea que el cáncer aparezca y acabe con su vida. Por lo que sabe que enseñándole tan cruel estampa, Jesse y su conciencia se lo pensarán dos veces antes de traicionarlo en favor de Mike. Lo único que tiene es su ego y su esperanza de crear el imperio que hace años perdió (en un grandioso monólogo donde Cranston vuelve a dar un recital). Quiere sentirse realizado y recibir el reconocimiento que se le ha negado toda la vida en su propio campo, la ciencia. Incluso Jesse le ofrece una salida digna del negocio donde ganaría cinco millones de dólares a cambio de la venta de su producto. Otra salida. Otra más. Otra posibilidad de reconducir su vida. Y, de nuevo, otra ocasión en la que Heisenberg secuestra a Walt para rechazarla por completo. ¿Cómo renunciar a algo qué te ha hecho sentir mejor qué en toda tu vida, solo porque la sociedad que te dio la espalda hace tiempo dictamina que es malo? Todos nos hemos visto en esas situaciones, a mayor o menor nivel, y que levante la mano el primero que no haya caído en la tentación…
Mientras tanto, Skyler sigue con su vida paralela al primer Walt, al de la temporada uno y dos. Se está conociendo a si misma en una nueva faceta, asimilando y consintiendo cosas que jamás se creía capaz de soportar. Y además, como Walt, sin nadie con el que poder desahogarse y sumiéndose en una depresión de caballo que solo puede acabar de forma trágica. Está repitiendo el camino de su marido paso por paso, siempre con un fondo y objetivo decente pero ya comprobamos en su momento (trama de Ted) que también está dispuesta a todo por lograr lo que quiere. En su día Walt se veía tentado a confesarse ante ella, como hoy en día ella misma se siente tentada a hablar con Marie. Por cierto, gracias a Marie sabe que Heisenberg sigue jugando sus cartas psicológicas para convertirla en la villana de la función y ser una víctima a ojos de Hank, su objetivo real. Skyler ha aceptado 100% su papel de cómplice a cambio de la seguridad de sus hijos y solo así se explica la completa sumisión ante la petición de su marido de cenar con su socio Jesse (por cierto, Jesse y Skyler no se veían desde el 1×02). Sabe que le pertenece hasta que el cáncer vuelva y acabe con la vida del padre de sus hijos, que la tortura psicológicamente cuando tiene ocasión para demostrar quien es el sheriff. Todo apunta a que la espera se va a hacer eterna (eso si el hecho de que Walter Junior y su hermana estén en la casa de Hank y Marie no es una preparación para cuando ella falte…).
El episodio de hoy también ha dejado dos peligrosos frentes abiertos. Por un lado está el contacto de Mike, que quiere acabar con «la cosa azul» para extender su territorio y eliminar competidores. Heisenberg no está dispuesto a ceder y de hecho parece ser que ha ingeniado un plan para que Mike, Jesse, el socio de Mike y él mismo salgan victoriosos. Pero algo me dice que el único beneficiado será nuestro antihéroe protagonista y provocará un efecto dominó de grandes proporciones. Por otra parte, Jesse parece estar atando cabos respecto a la nueva personalidad de Mr. White. Su reciente frialdad, su determinación, el haberse quitado de en medio a Gus Fring, su comprensión con Todd por el asesinato del niño…y el hecho de ponerse a silbar tranquilamente segundos después de ver por televisión al propio niño y darle un discurso a Jesse sobre la honorabilidad de su trabajo y lo que le cuesta conciliar el sueño por este asunto. Jesse se da cuenta de que a Heisenberg no le importa el niño ni el sufrimiento de sus padres como a él y sabe que Gus no envenenó a Brock… ¿Será Saul la clave de todo esto?, ¿Saldrá el tema Brock en algún momento?, ¿Será por eso que tengo la sensación de que Heisenberg y Jesse van a protagonizar un duelo a muerte en la segunda parte de la quinta temporada de la mejor serie de la actualidad (y de la historia con The Wire) a modo de Jesse James-Robert Ford?
totalmente de acuerdo!!pedrazo de analisis,capitulazo ,otra vez….thanks Gillian,grande Cranston
No me había detenido a leer tus críticas de Breaking Bad, y ahora que lo hice me llevo una grata sorpresa. Excelente trabajo, y estaré atento a las próximas.
Un alcance: Tengo entendido que la niña a la que protege Mike no es su sobrina, sino su nieta. ¡Saludos!
Muy buena review, si señor. Te felicito y leeré todas las que quedan de aquí al final. Saludos.
Felicidades! buena reseña, no como unas que siempre son malisimas (Milenio) jo jo saludos!